El Banco de México (Banxico) reconoció que los estímulos fiscales a los combustibles, instrumentados por el gobierno federal, sí han contribuido a contener las presiones inflacionarias, en un entorno externo muy complejo, derivado de la pandemia del covid-19 y el conflicto bélico en Europa del Este, que ha llevado a tener incrementos de precios importantes.
Al respecto, el subgobernador del Banxico, Jonathan Heath, apuntó que “es muy importante señalar que nos ayudó mucho esta política para acotar la inflación en el país, especialmente cuando lo comparamos con muchos otros países que no tienen una política igual.
“Yo creo que, efectivamente, la inflación pudiera haber sido mucho más elevada, no sé si 14 por ciento o más, pero es muy probable que sí porque hay efectos de segundo orden y eso nos ayudó a acotar la inflación a los niveles que tenemos ahorita”, dijo.
Sin embargo, agregó, así como ayudó a minimizar el incremento en la inflación cuando estaban aumentando los precios de la gasolina, no va ayudar ahora que ya se están retirando los subsidios porque el precio de la gasolina está bajando a nivel mundial.
La Secretaría de Hacienda indicó que el mecanismo de estímulos al consumo de combustibles, por la vía del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), ha probado su eficacia en preservar la estabilidad en los precios de los combustibles, pues ha evitado que la inflación esté en 14 por ciento.
