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Nueva era en el diseño gráfico: Adobe compra a Figma, empresa clave en el negocio colaborativo

La empresa Adobe invirtió 20 mil millones de dólares en comprar Figma, una empresa emergente clave en el negocio del diseño colaborativo, con lo que comienza una nueva era en el mundo de las herramientas de diseño gráfico.

Esta es la novedad más relevante del año en el mundo del diseño gráfico global, porque Figma amenazaba con ser un rival de peso para Adobe, indicó Merca 2.0.

La transacción se va a llevar adelante parcialmente en efectivo, y el resto por medio de la transferencia de acciones de Adobe.

Figma era la empresa detrás del software de diseño con herramientas colaborativas en la nube. Continuará operando de manera independiente, según confirmaron ambas empresas en sendos comunicados.

“La fusión de Adobe y Figma va a marcar el inicio de una nueva era de creatividad colaborativa”, señalaron.

Figma va a seguir siendo operada de manera independiente por Dylan Field, fundador y CEO de la compañía, pero el ejecutivo responderá a David Wadhwani, de Adobe.

Adobe deberá esperar, como es habitual en estos casos, hasta 2023, una vez que tenga todas las aprobaciones regulatorias correspondientes.

Adobe compró Figma porque la empresa emergente tuvo un gran crecimiento en tiempos de pandemia de la mano de sus herramientas de diseño colaborativas y con un potente enfoque en la nube.

Figma, con 10 años de actividad, tenía el gran mérito de haberse ubicado entre las mejores empresas de un sector dominado por Adobe y se había transformado en la herramienta favorita en empresas tecnológicas como Google y Microsoft.

Según la CNBC, se había vuelto tan popular dentro de Microsoft, que les prohibió a sus empleados seguir usando esas herramientas para no dañar su relación de más de dos décadas con Adobe.

Puntualmente, Figma competía directamente con Adobe en áreas como Adobe XD.

Según Bloomberg, la idea de adquirir Figma no es sólo quitar a un competidor del medio, sino que Adobe ha visto en esta empresa las herramientas necesarias para poder combatir el escepticismo de sus inversionistas, que en los últimos años han comenzado a tener dudas respecto de si la gigante podría seguir dominando el sector del diseño profesional.