La imposición de cuarentenas entre países europeos por el COVID-19, como las del Reino Unido o Noruega a los viajeros procedentes de España, sitúa al sector turístico en el peor de los escenarios previstos por el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC), en el que se ponen en riesgo este año hasta 197.5 millones de empleos a nivel global.
En una entrevista, la presidenta de esta entidad, Gloria Guevara, recuerda estas previsiones para el sector, que apuntan que en el peor de los escenarios, la caída del turismo causaría una pérdida en el producto interior bruto (PIB) mundial de más de 5.5 billones de dólares.
Se trata de una caída del 62 por ciento respecto a 2019, y el número de llegadas de turistas en el mundo se reduciría en un 73 por ciento.
Los empleos del sector turístico que se podrían perder en todo el mundo alcanzarían 197.5 millones si continúan las cuarentenas, y en España peligran 2,3 millones de empleos en 2020, 878 mil más que los los 1.45 millones previstos en el escenario previo a la instauración de cuarentenas y recomendaciones de no viajar al país o a varias de sus regiones.
La falta de colaboración entre los países europeos para establecer un marco común frente al coronavirus hará que el número de empleos afectados en Europa en 2020 se incremente desde 18,4 millones hasta 29.5 millones, con una pérdida de 1.6 billones de dólares (1.4 billones de euros) al PIB, los que supone 608 mil millones (517 mil millones) más de lo estimado en un escenario menos severo.
Para Guevara, la decisión del Gobierno británico de imponer una cuarentena a todos los viajeros que lleguen desde España, “desafortunadamente genera inestabilidad e incertidumbre y tiene un gran impacto” también para el propio Reino Unido, donde el número de empleos que se ponen en riesgo pasa de 1.9 millones a 2.8 millones.
Además, a la máxima responsable de WTTC le preocupa que “el tema se politice y la gente empiece a pensar en reciprocidad”, siendo la cuarentena el principal daño al turismo porque la desconfianza que genera hace que la gente tema incluso más quedarse atrapada en un país que contagiarse.