El secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Rogelio Ramírez de la O, aseguró que la economía mexicana sigue en camino de recuperación y la banca continuará siendo un motor clave del crecimiento.
Durante la inauguración de la 85 Convención Bancaria, el titular de la SHCP destacó que el gobierno federal contribuyó con 630,000 millones de pesos para impulsar la recuperación económica, la cual se dispersó en proyectos de infraestructura, como el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) o la refinería de Dos Bocas.
“En esta fase de reactivación económica estamos convencidos de que la banca o el sistema financiero continuará siendo crucial para darle un mayor impulso a la economía y promover el bienestar de todos los mexicanos”, afirmó.
Asimismo, Ramírez de la O dijo que la banca también será relevante para fomentar la participación de las instituciones de tecnología financiera (fintech), las cuales son actores importantes para el financiamiento de las nuevas empresas.
Ante esto, la SHCP en conjunto con la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) están trabajando en una agenda regulatoria para reducir la carga burocrática que implica el solicitar un financiamiento bancario.
También buscan que las instituciones financieras tengan más facilidades para otorgar créditos de manera digital, pues la pandemia aceleró el uso de nuevas tecnologías en diversos sectores de la economía.
“En 2021 reafirmamos nuestro compromiso de promover un sistema financiero más profundo, incluyente y accesible, sin que eso quiera decir que ya acabamos con la tarea. La mayor parte de las instituciones están llevando a cabo una ampliación de su oferta digital para proveer más y mejores herramientas a los usuarios, inclusive sin sucursales o sin infraestructura física”, sostuvo el secretario de la SHCP.
En ese sentido destacó que México inició el año con finanzas públicas sanas y un sistema bancario sólido y capitalizado; no obstante el país tendrá que sortear los efectos que aún siguen por la pandemia de coronavirus.
A lo que se debe sumar el conflicto bélico que se vive entre Ucrania y Rusia que traerá consigo la irrupción de algunas cadenas de valor que indudablemente impactarán en los precios; así como el reto de controlar la inflación.